No cabe duda de que el grupito neoliberal encabezado por Enrique Peña Nieto está logrando mover a México, pero no en apoyo al paquete de reformas “estructurales” (con las que pretende privatizar petróleo, electricidad, educación pública, agua y el sistema de salud), sino para rechazarlo.
La lucha del magisterio organizado en la Coordinadora de Trabajadores de la Educación (CNTE), rápidamente ha ganado el apoyo del estudiantado de los principales centros educativos, UNAM, IPN, UAM, UACM, UAV, UNP, UABJO, normales rurales, sindicalismo universitario, padres de familia, y del pueblo en general que se incorporaron a la Jornada Nacional de Protesta de los días 11, 19 y 20 de septiembre, para demandar la abrogación de la mal llamada Reforma Educativa que consiste en despojar a los profesores de derechos conquistados a lo largo de décadas de lucha y eliminar su estabilidad laboral.
Con paros en los centros educativos, bloqueos de carreteras y calles, manifestaciones, toma de instalaciones de la SEP, mítines y brigadeo se movieron decenas de miles de hombres y mujeres para detener la ofensiva neoliberal del PRI-gobierno, aliado con el PAN y un sector del PRD.
El uso de la violencia represiva del gobierno priísta y sus aliados el pasado viernes 13, durante el desalojo del zócalo del campamento magisterial, no quebrantó la voluntad de lucha de miles de maestros que lo ocupaban. Ante la abrumadora fuerza de la policía federal, los granaderos de Miguel Ángel Mancera, militares encubiertos, tanquetas y helicópteros que los atacaron con gases lacrimógenos, toletazos y pedradas, se replegaron al monumento a la Revolución para reorganizarse y continuar luchando.
En el operativo represivo los granaderos cometieron toda clase de abusos contra quienes trataron de resistir el desalojo o tan solo se atravesaron a su paso. Ocurrieron decenas de heridos, detenciones arbitrarias y golpizas que fueron justificadas por la Comisión Nacional de Derechos Humanos y los medios de desinformación.
Pero lejos de provocar desmoralización y desánimo la lucha magisterial se ha fortalecido, como lo demuestra la exitosa jornada de lucha del 19,20/IX/2013 en la que participaron cientos de miles de maestros y sus aliados populares de cuando menos 26 entidades.
Esta lucha de clases entre el gobierno de Peña Nieto, al servicio de los empresarios como el magnate Claudio X González de Mexicanos Primero y amplios sectores del pueblo mexicano que son conscientes de los peligros que entraña la profundización del capitalismo salvaje mediante las reformas mencionadas, se desarrolla en un contexto de recesión económica, creciente desempleo y empobrecimiento de millones de familias.
Situación agudizada por la destrucción que han dejado los huracanes Ingrid y Manuel causantes de inundaciones, destrucción de viviendas, caminos, carreteras, etc en más del 80 por ciento del territorio nacional con un saldo hasta el momento de cien muertes y varios millones de mexicanos que perdieron lo poco que tenían. Pero el desastre inevitable fue peor debido en gran parte a la omisión e irresponsabilidad de un Estado entregado a las fuerzas del “libre mercado” y que abandonó la planeación urbana y su obligación de garantizar la seguridad de la población.
La propaganda oficial habla de que todos los mexicanos debemos hacer a un lado las diferencias y disputas, pero lo cierto es que Peña Nieto no pierde la oportunidad para lucirse como un benefactor preocupado por el bienestar de los damnificados y que el PRI a través del programa contra el hambre y el ejército hacen poco para apoyar a los afectados. Ahora reconstruirán y limpiarán de pobres para hacer negocio.
En la UNAM un sector del estudiantado se ha percatado de la gravedad de lo que ocurre en el país, pero los académicos no se dan por enterados de que la misma reforma con la que el gobierno pretende someter a los profesores de educación básica se les podría aplicar a ellos en todo el país, ya que se trata de una Ley de carácter general.
Sabemos que el 75 por ciento de los profesores de la UNAM son de asignatura, que son contratados cada semestre y reciben salarios miserables, aunque hayan trabajado varias décadas. También es sabido que existe un sector de profesores que devengan altos sueldos gracias al programa de estímulos a la productividad.
La mala noticia es que la Ley General del Servicio Profesional Docente afectará a TODOS y de manera más grave aún al sector de profesores que tienen nombramientos de medio tiempo y/o tiempo completo y que ha venido gozando de estabilidad laboral. Dicha reforma también cancela la libertad de cátedra.
Razones por las que es necesario no sólo apoyar a la CNTE, sino también emprender la lucha en propia, en defensa de nuestro trabajo y las pocas pero importantes condiciones laborales que son resultado de la lucha de décadas, a pesar del sindicalismo espúreo que padecemos tanto académicos como administrativos en la UNAM.
Otra tarea estratégica que tenemos que abordar cuanto antes, es la de construir una propuesta de reforma educativa emancipadora, que eduque para fomentar la creatividad, el pensamiento crítico y la capacidad para investigar de los estudiantes. Contraria a la educación por competencias que sólo busca educar para resolver los problemas de la empresa capitalista haciendo de las escuelas y universidades dóciles departamentos de formación de mano de obra polivalente.
Igual por lo que se refiere a la reforma energética de Peña Nieto, de la cual sabemos que tiene por objeto entregar el control del petróleo y la electricidad al capital. Pero no basta con luchar para que el Estado (corrupto y autoritario) actual siga controlando esos bienes, sino que es necesario discutir un proyecto que ponga esos recursos en manos del pueblo trabajador para el desarrollo y bienestar de la mayoría.
Por lo pronto y sin dejar de dar la lucha ideológica contra la derecha de dentro y fuera de la UNAM, hay que sumarnos a las acciones que acordaron este fin de semana 28 secciones de la CNTE y decenas de organizaciones estudiantiles, obreras y populares durante el Tercer Encuentro Nacional Magisterial y Popular:
1) Lunes 23. IX.- Marcha a del monumento a la Revolución a la Segob para demandar el establecimiento de una mesa de diálogo.
2) Miércoles 25.- Protesta nacional que incluye dos manifestaciones en el D.F. y bloqueo de carreteras, toma de instalaciones, movilizaciones, etc en todo el país.
3) 2 de Octubre.- Tercer Paro Cívico Nacional para para demandar la abrogación de la reforma educativa peñanietista, denunciar la toma militar del zócalo y la represión contra el movimiento.
4) 5 de octubre.- Realización del Cuarto Encuentro Nacional Magisterial y Popular rumbo a la creación de un gran frente nacional contra las reformas neoliberales.
¡¡ A UNIRNOS A LA LUCHA DEL MAGISTERIO DEMOCRÀTICO, EN DEFENSA DE LA GRATUIDAD EDUCATIVA EN TODOS LOS NIVELES Y POR UNA EDUCACIÓN EMANCIPATORIA!!
Taller de Economía del Trabajo de la Facultad de Economía
23 de septiembre de 2013
Me parece su articulo muy acertado. Felicidades!
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