miércoles, abril 10, 2013



  Margaret Tatcher, sirviente del capitalismo
Nelly Moro

La historia oficial, es la historia del vencedor, en este caso, la historia “victoriosa” de Margaret Tacher, ex primer ministra de la Gran Bretaña en el periodo 1979-1990 en la que vence a los mineros “el enemigo interno” del país, es la historia que durante muchos años se ha contado, y que muchos creen que ya se ha olvidado.

Sin embargo tras la muerte de la señora Tatcher la destrucción que causo a los trabajadores mineros sigue y las medidas de corte neoliberal que implementó en la gran Bretaña y que junto con Estados Unidos dirigido por Reagan impusieron a la fuerza en Latinoamérica siguen vigentes. Tras la recesión económica mundial, la señora Tatcher vio en las teorías liberales del economista austriaco Friedrich von Hayek, la respuesta para resolver los problemas económicos de la Gran Bretaña.

 La tesis fundamental de esta teoría es que el Estado debe de retirarse del control de la economía, por lo tanto fiel a esta “nueva doctrina” Tatcher comenzó una oleada de privatizaciones de empresas del sector público y clausurando otras, como fue el caso del sector minero. El sector minero representado por el NUM ( National Union of Mineworkers), fue uno de los sindicatos que se opuso ferreamente a las nuevas políticas económicas neoliberales, que atentaban contra las conquistas laborales obtenidas, ya que durante el siglo 20 los sindicatos mineros tuvieron una fuerza de gran alcance en la política británica.

 Tras la firme convicción de debilitar al sindicato minero, para así poder cerrar minas y privatizar el resto, el gobierno de Tatcher trazo un plan para lograr su cometido, y parte de ese plan fue tener una reserva secreta de carbón traído de Francia, para así poder negarse a toda negociación con los trabajadores mineros, además el parlamento aprobó una enmienda donde ilegalizaba la huelga si esta era por votación a “mano alzada” y no por votación secreta de cada trabajador, haciendo que dirigentes sindicales “vendidos” al gobierno británico calificaran la huelga de ilegal, restándole fuerza al movimiento.

 Poniendo en práctica su plan el 1 de marzo de 1984 Tatcher ordenó el cierre del pozo carbonífero de Conttonwood, y anuncio el despido de 20 mil trabajadores, así como el próximo cierre de 20 pozos más. Esto llevo a 150 mil trabajadores mineros organizarse y el 5 de marzo de 1984 iniciar la huelga que duraría un año. La embestida del gobierno británico fue brutal para los trabajadores mineros que perdieron toda protección legal, fueron despedidos y perdieron sus pensiones. Además de una serie de represiones contra las manifestaciones mineras, una de ellas fue en la localidad de Orgreave, donde había una central térmica que los mineros quisieron paralizar, el resultado: la peor represión policíaca donde decenas de mineros quedaron heridos. Margaret Tatcher no actuó sola, la burguesía británica apoyo la represión al sindicato minero, criminalizando a los dirigentes de NUM acusándolos de pro comunistas, además en los medios de comunicación a los trabajadores se les culpaba por generar la violencia en las manifestaciones.

 El 3 de marzo de 1885, tras ser acorralados por el gobierno británico, sin apoyo social, sin sustento para ellos y sus familias, se vieron obligados a renunciar a la huelga el 3 de marzo de 1985, siendo este un gran triunfo para la burguesía inglesa y una gran perdida para las conquistas laborales inglesas. Esta derrota sindical abrió la puerta para el impulso de la flexibilización y precarización del trabajo. La lucha minera no solo fue laboral, sino también implico una lucha política e ideológica. La lucha entre los trabajadores contra la vorágine del capitalismo, esta lucha minera no solo impacto la Gran Bretaña, si no fue la punta de lanza para que la burguesía arremetiera contra los sindicatos del mundo.

 Hoy en día los estragos de esta lucha siguen reflejándose en la sociedad británica, comunidades mineras que se encontraban cerca de los pozos cerrados quedaron desoladas; la pobreza, la drogadicción y la delincuencia son parte de las que alguna vez fueron unas prosperas comunidades mineras. Muchos de los mineros despedidos han tenido que sobrevivir de la caridad y solidaridad de otros trabajadores. Las políticas económicas neoliberales son políticas genocidas, Margaret Tatcher ha muerto, sin embargo su legado sigue matando y oprimiendo al proletariado mundial.

lunes, abril 08, 2013

¿Guerra en puerta?

Nelly Moro Estados Unidos saca su vieja receta para lograr reactivar su fallida economía. No le apuesta a la innovación productiva, ni a la creación de empleos, reforma fiscal o ningún tipo de reforma en la estructura de su economía. Le apuesta a lo que sabe hacer bien, la guerra contra una pequeña nación: Corea del Norte. Como la guerra en el medio oriente no le ha funcionado del todo, ahora busca nuevos horizontes bélicos. En su papel del “protector del mundo libre y democrático” y después de largos años de hostigar al pequeño país “comunista”. Estados Unidos finge indignación ante la declaratoria de ataque nuclear de Corea del Norte, si Corea del Sur y Estados Unidos siguen con sus provocaciones y ahora proclaman a los cuatro vientos que no permitirán que Corea del Norte, se salga con la suya, por que “es una grave amenaza” , palabras de Barak Obama . Como guión de película refrita hollywoodense Estados Unidos y su colonia Corea del Sur toman el papel del bueno y ponen Norcorea el papel del comunista malo, antes los supuestos antagonistas de Estados Unidos han sido por mencionar algunos Afganistán, Santo Domingo, Nicaragua, Panamá, Irak y Vietnam. E.U.A ha basado su crecimiento económico y su poder imperial en Industria armamentista y no es de sorprenderse que la mayor parte de los senadores y políticos de primera línea estadounidenses sean accionistas mayoritarios en empresas de producción bélica. Los gastos militares de E.U.A. tienen efectos positivos en gran parte de su aparato productivo, pero no sólo ese es su beneficio, la mayor parte de su política exterior se orienta a propósitos militares con un objetivo de dominio, para explotar los recursos naturales, económicos y humanos de los territorios conquistados. E.U.A mantiene 560 bases militares en todo el mundo y tuvo en el 2011 un presupuesto militar de 3.7 billones de dólares y para el 2012 de 4.4 billones de dólares aproximadamente. Cantidad que equivale tres veces al Producto Interno Bruto de México. La gran mayoría de las corporaciones estadounidenses tienen una división o subsidiaria dedicada especialmente a la industria de la guerra, lo que producen van desde armas, armás químicas, trasporte bélico, telecomunicaciones, mísiles, tecnología de espionaje, alimentos, medicinas, ropa y accesorios para las tropas. Algunas de estas corporaciones son Phlilip Morris, Pepsi Co, General Motors, Ford Motors Microsoft, General Electric, Motorola entre otros. Todas estas empresas fueron beneficiarias de contratos millonarios por parte del gobierno de George Bush cuando inicio la improvisada guerra contra Irak y el “terrorismo”. Guerra que no dio los resultados esperados para los Estados Unidos y que ha traído más apuro económico al imperio incrementando su deuda pública. En el gobierno de George Bush en 8 años la deuda pública creció en 4,400 millones de dólares; en el gobierno de Barack Obama, 6,400 millones de dólares en 4 años, dando un gran total de deuda pública de 16.4 billones de dólares para el 31 de diciembre del 2012. Ahora los estadounidenses, sus corporaciones y sus aliados buscan restar sus números negativos iniciando una guerra contra Corea del Norte, y el pequeño país esta dispuesto a defender su soberanía ante el Imperio y sus aliados. La moneda esta en el aire, todos los demás países están a la expectativa para ver que bando toman y será el que les de mejores rendimientos. Lo que si es seguro, ya sea Corea del Norte u otro país, Estados Unidos esta dispuesto hacer la guerra, por que es su modus vivendi y en lo esta basada su economía.