ORGANIZARSE Y REDOBLAR LA LUCHA CONTRA EL GOBIERNO DE PEÑA NIETO

Tomás Oropeza B.

A un año de los trágicos acontecimientos en que el gobierno de Enrique Peña Nieto, supuesto mandamás del Estado mexicano, ejecutó  la desaparición forzada de los 43 normalistas de Ayotzinapa, con la participación de las policías federal, estatal,  municipal y  el ejército,   asesinando además a otros tres estudiantes y a varios deportistas, no cesa la lucha popular demandando su presentación con vida.

El  gobierno de EPN no puede remontar el grave desprestigio y aislamiento que se agudiza todos los días por la prepotencia y soberbia con que se conduce  y ahora intenta construir otra mentira “histórica” mediante la realización de un tercer peritaje para contraponer al informe de los Investigadores Independientes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA, que dictaminó que la supuesta incineración de los normalistas en el basurero de Cocula nunca ocurrió. En breve, anunció el gobierno, cinco expertos harán un nuevo peritaje. Pero lo que ha quedado muy claro es el papel de las fuerzas armadas en este crimen de Estado, dada la intransigente negativa del general Salvador Cienfuegos, titular de la secretaría de la Defensa Nacional a que se interrogue al personal de guardia la noche de Iguala.

En este contexto de crisis social y política se suma el movimiento magisterial,  que el 12 de octubre realizó una jornada nacional de lucha por la abrogación de la reforma educativa y la torpeza con que el flamante titular de la SEP Aurelio Nuño está enfrentando el conflicto, para darle gusto a los ricachones agrupados en Mexicanos Primero, que claman por la represión a los profesores y una mayor injerencia en la educación para privatizarla.

Los maestros no se dejan intimidar con la amenaza de que se les descontarán las faltas y en 28 entidades se movilizaron, bloquearon carreteras y comercios y realizaron decenas de mítines para explicar los motivos de su lucha.

Como su antecesor, Emilio Chuayyfet, Nuño hizo gala de insidia tratando de manipular a los maestros y a la población, con varios mensajes a cual más de torpe: “Los derechos de los profesores terminan donde comienzan los derechos de los niños a recibir una educación de calidad”, slogan que olvida que la lucha de los profesores contra la reforma educativa es para impedir que se privatice la educación y que se les eduque como simples peones, tal como pretenden los empresarios agrupados en Mexicanos Primero y el Consejo Coordinador Empresarial.

Por su parte los estudiantes de la UNAM, UAM, Chapingo,IBERO, Bachilleres, Normales Rurales y decenas de instituciones de educación media y superior se han  estado manifestando y el pasado 2 de octubre, salieron a las calles conmemorando el 47 aniversario de la matanza de Tlatelolco. Manifestación combativa y disciplinada donde participaron también contingentes populares de Atenco, amas de casa, trabajadores sindicalizados,etc. Pero no sólo en la capital del país se realizaron manifestaciones. Estas tuvieron lugar en todas las entidades, donde hay estudiantes dignos.

Debido a la crisis económica, social y política mexicana en los años recientes ha crecido el número de marchas, bloqueos y muestras de inconformidad. La Cámara Nacional de Comercio, Turismo y Servicios en Pequeño de la Ciudad de México (Conacope) reportó hace unos días que en 2014 en el DF se llevaron a cabo 24 manifestaciones por día y un total de 9 mil 111 a lo largo de ese año, no más en la capital del país.

Es mentira que el pueblo mexicano es pasivo y agachón. Lo que podemos ver es que en todos los rincones del país hay movimientos sociales contra un gobierno incapaz, corrupto y dictatorial.

Campesinos, obreros, mineros, autodefensas, guardias comunitarias, colectivos estudiantiles, pueblos originarios, familiares de desaparecidos, etc. hoy están en pie de lucha, pero desarticulados. Sin embargo, esa condición comienza a superarse y ya comienza a plantearse la construcción de un gran frente que una todas esas fuerzas, con una política independiente de los partidos políticos (PRI, PAN, PRD, PT, PV, PANAL, MORENA y demás mierda)  con un programa anticapitalista, para llevar adelante la lucha por un cambio social en México, pero que deberá plantearse en lo inmediato el castigo de los responsables de la llamada guerra contra el narco, la desaparición de miles de personas, el  infanticidio de la guardería ABC, la desaparición de los 47, Pasta de Conchos, Aguas Blancas, etc.

El cambio social  revolucionario es la única forma de comenzar a resolver los grandes problemas económicos y sociales de nuestro pueblo.