A 40 AÑOS DEL 68, MEXICO ESTA EN EBULLICIÓN

Tomás Oropeza Berumen

México, 2008-10-06.- Cada vez surgen más indicios de que en México se esta gestando una situación prerrevolucionaria, porque en la cúpula del poder han comenzado a surgir contradicciones sobre la manera de enfrentar la crisis económica y social en que se haya inmerso el país y porque abajo los explotados han comenzado a expresar inconformidad y rebeldía ante el gobierno del panista Felipe Calderón.

Es claro que la oligarquía está dividida y harta del presidente títere que impuso mediante el fraude electoral del 2006 que no ha sido olvidado por nuestro pueblo, como lo demuestran los dos jóvenes universitarios que le recordaron a Felipe Calderón que es un ejecutivo carente de legitimidad política y falso que en el país exista la libertad. Ambos estudiantes expusieron su inconformidad pese a estar rodeados de la guardia pretoriana del espurio y usurpador que se dice comandante supremo del ejército.

La terrible y heroica auto incineración del maestro rural y líder campesino Ramiro Guillén Tapia, en Xalapa, Veracruz, para lograr atención a un problema de su comunidad por parte del gobernador priísta Fidel Herrera, es otra demostración de que el pueblo esta dispuesto a los mayores sacrificios, aunque por ahora no sepa como encauzar su lucha emancipatoria.

Los campesinos del ejido Miguel Hidalgo en la Trinitaria, Chiapas, a quienes la policía del gobernador perredista Jaime Sabines, les asesinó a 6 compañeros, hirió a 10 y encarceló a decenas, pero que aún estando inermes le arrebataron a los polizontes varios fusiles son otra demostración de la bravura del pueblo al que le niegan el derecho a administrar el territorio donde esta asentado, los Lagos de Montebello y las ruinas de Chincultik.

El potente movimiento magisterial contra los intentos del gobierno para destruir el sistema nacional de educación pública mediante el Acuerdo por la Calidad Educativa se está extendiendo desde el estado de Morelos a otras entidades, como Zacatecas, Baja California, Quintana Roo, Querétaro, Guerrero, Chipas, Oaxaca Michoacán, etc.. y evidenciando que Elba Esther Gordillo y su aparato de control sindical están resquebrajándose.

La gigantesca y combativa manifestación estudiantil del 2 de octubre, en la que participaron varias generaciones recordando el movimiento del 68 y a los mártires de Tlatelolco masacrado por el gobierno que sigue representando los mismos intereses de aquél entonces y protegiendo a los genocidas, revela que la juventud esta despertando y adquiriendo conciencia de que su papel es el de luchar al lado de trabajadores y campesinos contra los responsables de la crisis que cimbra al sistema capitalista a escala mundial.

Hoy se esta rompiendo el control que la ideología dominante ejercía sobre los jóvenes porque se han dado cuenta de que el sistema sólo les ofrece brutalidad policíaca, carencia de educación, salud, explotación y desempleo.

En el estado de Guerrero, donde cuando menos operan las guerrillas del EPR, ERPI y FARP, el PRI “triunfa” con un abstencionismo mayor al 50% y hoy se sabe que muchos de los candidatos de todos los partidos estuvieron financiados por el narcotráfico, incluyendo los del PRD, que ahora está en el lugar que le corresponde gracias a la política del gobernador Zeferino Torreblanca, un empedernido enemigo del pueblo y servil aliado de Calderón.

En un panorama en que la supuesta guerra contra el narcotráfico arroja un saldo cercano a los 5 mil muertos en menos de 2 años, la violencia sube de intensidad, abarca todos los estratos sociales y ya es inocultable la existencia de escuadrones de la muerte, paramilitares y operativos encubiertos para generar terror entre la población. Esa es la aplicación del Plan Mérida, diseñado en EE.UU para sembrar el terror de estado de este lado del Río Bravo.

Todo esto es apenas un esquema de lo que ocurre en un país que ya está sufriendo las consecuencias de la ineptitud del gabinete de Calderón, que se negaba a aceptar el peligro de la crisis norteamericana para nuestro país y que ahora pretende recortar el presupuesto para el 2009 en los renglones sociales, porque estamos seguros que al ejército y demás cuerpos represivos no se les quitará un centavo.

Vivimos hoy las consecuencias de 26 años de aplicación del modelo de libre mercado en el que nunca han dejado de prevalecer los intereses de los grandes monopolios, la oligarquía y el imperialismo causantes de la debacle económica en curso.

Y a pesar de las evidentes muestras de la debilidad política del gobierno calderonista y de las muchas señales que abajo las masas se están saliendo del control corporativo y gubernamental, sigue en pie la intención de privatizar el petróleo para entregárselo a las trasnacionales de varios países imperialistas. Se dice que será en este mes cuando en el Congreso la pandilla del PRIAN más un sector del PRD consumarán su traición al país.

A menos que se produzca una enérgica reacción popular que dé un vuelco a la situación.

Sabemos que en momentos como el actual se produce una despiadada concentración y centralización del capital, a costa de la quiebra de miles de empresas y del desempleo de millones de trabajadores que son despojados de sus fuentes de ingresos.

Es un hecho de que el plan de salvamento instrumentado por el Estado norteamericano gobernado por George Bush para paliar la crisis “financiera e hipotecaria” no cesará a pesar del plan de rescate por 700 mil millones de dólares recientemente aprobado.

La caída de todas las bolsas de valores en el mundo demuestra que no existe confianza en esa medida porque hasta los mas ciegos se dan cuenta de que la medicina suministrada será sólo un calmante temporal para la debacle que apenas comienza y que ha desconcertado a todos los economistas vulgares al servicio del sistema.

La crisis hay que buscarla en la sobreproducción relativa de mercancías que no encuentran compradores.
Históricamente las crisis capitalistas se han resuelto mediante la gigantesca destrucción de riquezas y fuerzas productivas a través de las guerras, con las cuales la burguesía se reparte el mundo y los mercados e impone nuevas formas de explotación sobre los pueblos.

El fascismo y otras formas de dictadura castrense han sido la solución para que los explotadores logren mantenerse en el poder. Tal como sucedió en la crisis de 1929 y antes de la Segunda Guerra Mundial.

Sin embargo las crisis económicas y sociales también han sido la oportunidad para que los trabajadores y sus aliados campesinos, indígenas, estudiantes, intelectuales, y minorías oprimidas tomen en sus manos el timón de la sociedad.