SE AGUIDIZA LA CRISIS POLÍTICA Y LOS CAPITALISTAS RETIRAN SU DINERO
Tomás Oropeza
México, 20 de septiembre.- La renuncia de Elba Esther Gordillo a la secretaría general del Partido Revolucionario Internacional (PRI), luego de que fuera amenazada con la expulsión por el bando encabezado por el virtual candidato de ese instituto a la presidencia, Roberto Madrazo, y la amenaza de la profesora postularse como aspirante al Ejecutivo, por el tricolor u otro partido, esta provocando un terremoto al interior de la clase política, dado el elevado peso político de la lidereza magisterial en el aparato corporativo de control de masas que ejerce a través del sindicato de trabajadores de la educación (SNTE), el más numeroso de América Latina.
Pero a la crisis política en el las cloacas del país, ahora se está sumando una intensificación de los problemas económicos con una masiva fuga de capitales hacia Estados Unidos, ante la incertidumbre que los ricos sienten por el futuro mexicano.
Así que ahora al desempleo masivo, la quiebra de empresas, la crisis del campo, y los bajos salarios, habrá que agregar que los dueños del dinero están optando por llevárselo a la tierra del Tío Sam en búsqueda de mayores ganancias e intereses.
Según el Banco de México, cuyo titular, el salinista Guillermo Ortiz Martínez, hace una semana criticó acremente la ineptitud del presidente Vicente Fox por su incapacidad para avanzar en la realización de las reformas estructurales que el FMI ha “recomendado”al país, en el primer semestre del año en curso cerca de 10 mil millones de dólares se fugaron hacia los bancos y empresas extranjeras y según esa institución es la mayor salida de divisas registrada durante un semestre desde hace 25 años, cuando se presentó una crisis financiera de graves consecuencias para el país.
De este modo el saldo de los depósitos e inversiones que los ricachones mexicanos han sacado de México ha tenido un constante aumento desde hace cuatro años para llegar hoy en día a casi 63 mil 500 millones de dólares. Cifra equivalente a 90 por ciento del monto de la deuda externa del sector público mexicano (70 mil 430 millones de dólares, según el último saldo dado a conocer por la Secretaría de Hacienda). Según la misma fuente la mayor parte de los capitales fueron enviados a otros países durante el primer trimestre del año, por un monto de 6 mil 311.9 millones de dólares.
Del total de recursos que se han ido del país, más de dos terceras partes, 68 por ciento, fueron canalizados a depósitos en cuentas bancarias del extranjero. La diferencia correspondió a inversiones fuera del país realizadas por mexicanos, en las que no se considera el valor de inversiones en bienes inmuebles ni de la tenencia de acciones de empresas que cotizan en los mercados de valores, así como otros activos no aclarados.
Llama la atención que ni siquiera en los últimos dos años de la administración de Carlos Salinas de Gortari se había registrado tan elevada salida de divisas. Según la balanza de pagos del Banco de México, a lo largo de 1993 los mexicanos enviaron al exterior 3 mil 602.5 millones de dólares. Para el trágico 1994, el año en que ocurrió el levantamiento zapatista, así como los asesinatos de Luis Donaldo Colosio y José Francisco Ruiz Massieu, la salida de dinero estrictamente de mexicanos fue de 5 mil 669.9 millones de dólares.
En el transcurso de 1995, cuando se desencadenó la crisis económica por los denominados "errores de diciembre", la segunda más grave del siglo XX, los mexicanos enviaron 7 mil 357.7 millones de dólares al exterior.
Para el penúltimo año de gobierno de Ernesto Zedillo, 1999, los mexicanos remitieron al exterior 4 mil 4.7 millones de dólares y todavía, en la primera mitad de 2000, antes de realizarse las elecciones presidenciales de aquel año, otros 989 millones de dólares fueron a engrosar las cuentas bancarias fuera del país.
Sin embargo, entre julio y septiembre de ese año, cuando ya se había definido el triunfo de Vicente Fox, la respuesta de los mexicanos adinerados fue contundente: se repatriaron 5 mil 584 millones de dólares. Y todavía en el último trimestre del mismo año retornaron 2 mil 504 millones de dólares adicionales.
Algo grave está pasando en México cuando los hijos predilectos del régimen del cambio, ya comenzaron a votar llevándose sus capitales del país en donde todo se les ha puesto en charola de plata.